RESEÑA TODO LO QUE NUNCA FUIMOS, DE ALICE KELLEN.

• Tapa blanda: 352 páginas
• Editor: Planeta; Edición: 1 (5 de febrero de 2019)
• Colección: (Fuera de colección)
• Idioma: Español
• ISBN-10: 8408204823
• ISBN-13: 978-8408204824

Sinopsis:

Primera parte de la bilogía "Deja que ocurra" de Alice Kellen:

Leah está rota. Leah ya no pinta. Leah es un espejismo desde el accidente que se llevó a sus padres.
Axel es el mejor amigo de su hermano mayor y, cuando accede a acogerla en su casa durante unos meses, quiere ayudarla a encontrar y unir los pedazos de la chica llena de color que un día fue. Pero no sabe que ella siempre ha estado enamorada de él, a pesar de que sean casi familia, ni de que toda su vida está a punto de cambiar. 
Porque ella está prohibida, pero le despierta la piel. 
Porque es el mar, noches estrelladas y vinilos de los Beatles.
Porque a veces basta un «deja que ocurra» para tenerlo todo.

La segunda parte de "Deja que ocurra", Todo lo que somos juntos, se publicará el 30 de abril de 2019. 

Sobre Alice Kellen:

Alice Kellen nació en Valencia y tiene veintiocho años. Es una joven promesa de las letras españolas que acostumbra a vivir entre los personajes, las escenas y las emociones que plasma en el papel. También es autora de las novelas Sigue lloviendo, El día que dejó de nevar en Alaska y El chico que dibujaba constelaciones, que fueron todo un éxito de críticas. Es una enamorada de los gatos. Y adicta al chocolate y a las visitas interminables a librerías.

Instagram: @AliceKellen_

Opinión personal:

No he dejado pasar ni un sólo día para hacer esta reseña, así que os podéis imaginar hasta dónde llega mi entusiamo. Lo cierto es que Alice Kellen nunca decepciona, lo he dicho un montón de veces, y me reitero. Incluso después de haberlo leído, tengo el hype por las nubes. No tengo modo de bajar sola, así que una escalera me vendría de perlas. Tonterías aparte, por esto, por sus maravillosas historias, es por lo que Alice es una de mis autoras de preferencia del marco nacional. Si me pongo a recordar cada una de las sensaciones que esta lectura me ha hecho sentir, todavía se me eriza la piel. Y eso, ya os digo que no es fácil de conseguir. La buena redacción es algo que con práctica se aprende, se perfecciona. Pero emocionar al lector, como ella lo hace....Es talento natural. Alice sabe contar historias, susurrarlas, darte la mano para que la sigas al interior de las páginas del libro, para que en lugar de ser una simple espectadora, alguien que lo observa todo desde fuera, sin emociones ni implicaciones personales, seas un personaje más, alguien que apoyado desde una ventana dentro de la historia, contempla a los personajes, su tristeza, sus motivos, sus alegrías, sus proezas, su valentía, su crecimiento personal.... Es increíble cómo puede con un lenguaje para todos, sencillo, ágil, sin florituras ni excesos, hacerte partícipe de cada sensación, cada pensamiento, cada caricia y cada beso  hasta sentirlos como si fueran tus percepciones, en tu piel, en cada nervio. Ya os he dicho que tengo el hype por las nubes, y sinceramente creo que va a tardar varios dias en que se me pase. No puedo ponerle ninguna pega. Ninguna. Es una novela preciosa, perfecta y maravillosa que os hará temblar de la emoción, de la pena, de la fustración, del entendimiento. Y disfrutaréis a la vez, de revivir o conocer si no lo hacéis de la genial banda sonora que la autora otorga a la historia, una banda sonora que brinda ese soplo de magia a la novela, que escuchas cuando lees sus páginas, y que acompaña tanto a los personajes, como al propio lector en este maravilloso recorrido.

Leer este libro implica que tienes que estar preparada. Preparada para sentir cosas, para ponerte en la piel de cada personaje, de cada una de sus reacciones, que a veces no entenderás o tal vez sí lo hagas, pero en la contradicción está la magia. Tenemos mirándonos de frente una novela romántica sin caer en lo empalagoso, con una historia sencilla pero que en las manos de Alice Kellen se vuelve mágica. Como os he comentado, su manera de narrar las cosas, es tan limpia, directa y emotiva, que vivirás la historia a través de sus páginas.

Conocéis esa sensación de eufória y tristeza a la vez, cuando al terminar de leer un libro, los personajes siguen contigo incluso después de cerrar sus páginas, como si los conocieras, fueran personas de carne y hueso, y sus vidas y personalidades hubieran pasado a formar parte de ti misma y de tus recuerdos? Es una sensación agridulce, porque implica acabar la lectura y ponerle final a una historia, aunque sus personajes permanezcan contigo durante mucho tiempo, o incluso lleguen a quedarse y a formar parte de ese exclusivo club de personajes de tus libros favoritos que te acompañarán siempre, que recordarás siempre, pero a la vez es increiblemente fascinante, y en cierta manera, también lleva implícito cierta intimidad, porque los personajes han conseguido traspasar los límites que impone el papel, para aterrizar directamente en tu corazón y en tu memoria, para emocionarte, llorar y vivir a través de ellos su propia historia. Eso es exactamente lo que consigue Alice Kellen, que vivas y sientas todo cuanto pasa en las historias que narra a través de sus personajes. Y esta vez para mí al menos, ha sido magistral. Axel dice que Leah tiene mágia. Yo digo que la magia de Alice fluye a través de Leah, de Axel, y de cada rasgo, sentimiento y reacción de cada uno de los personajes que tan humanos y tan perfectamente imperfectos nos regala Alice en sus historias. Sólo diré que Mike y Rachel, de 33 razones para volver a verte, todavía siguen conmigo, y lo harán para siempre.

Podría decir muchas más cosas, muchas. Podría alargar esta reseña bastante más. Podría desvelar parte del contenido sin haceros spoilers claro está, pero no lo haré. No hace falta. No os voy a comentar nada más del argumento del libro porque  la sinopsis cuenta lo suficiente. Descubridlo, saboreadlo. Disfrutad de cada sensación, porque os prometo que cuando terminéis de leer van a pasar dos cosas: primero, tendréis ganas de llorar o de gritar de la emoción, y segundo, no podréis soportar la espera para tener la segunda parte en vuestras manos. Esta casi todo dicho. Las historias de Alice Kellen siempre me dejan soñando despierta, siempre. Y siempre me emocionan. Y esta vez, no ha sido diferente. Ha sido una experiencia religiosa, como dice la canción. Brutal, química, enternecedora, adictiva, increíblemente maravillosa, y alucinantemente espectacular.  Casi me puse a gritar de la fustración, casi, y todavía me cosquillean las manos mientras analizo la lectura para escribir esta reseña. Decir que estoy impaciente por seguir con la segunda parte es un eufemismo. Creo que me voy a aficionar a tomar té. Y puede que retome la pintura. Y también puede que empiece a escuchar a los Beeatles. No os digo más. Demasiado he dicho ya. Leedlo. Hacedme caso. Alice Kellen es emoción en estado puro.

Mi valoración:

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